Aseguran que el dueño de La Colina busca dejar morir a la empresa

El presidente del Directorio de La Colina,aseguró que Walter De Pellegrín, el dueño, pretende dejar morir la empresa y despedir a los más de 800 trabajadores que se emplean en la planta alimenticia de San Rafael, Mendoza.

Desde el Sindicato de la Alimentación mendocino salieron a denunciar con dureza al dueño de La Colina.

El gremio asegura que la patronal busca dejar morir la empresa que emplea de manera directa e indirecta a mas de mil trabajadores.

Es que el dueño dijo sin tapujos que sigue a cargo de la conducción de la empresa La Colina.

Pero, además, aseguró que “no existe ninguna causa judicial que diga lo contrario”.

Ni Macri ni el Papa

“Por ahora, ni Macri, ni el Papa me van a sacar», dijo Rubén Yanzón.

«Yo lo que busco es que la empresa siga trabajando”, señaló el presidente del directorio de la histórica conservera.

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Sus palabras resonaron en el Sindicato que asegura que está desvinculado de la empresa.

El presidente del Directorio se adjudicó el «éxito» de la suspensión del remate que estaba programado.

Es por la deuda con la Obra Social del Personal de la Industria de la Alimentación.

Se trata de una situación confusa, en el medio de un contexto preocupante, dado que hay 800 familias que lo único que buscan es mantener la fuente de trabajo.

Maniobras extrañas

Yanzón expresó que la ofrecieron la dirección de la empresa y que apenas llegó, según sus palabras, descubrió maniobras extrañas por parte del dueño.

“La Colina, entre otras cosas, tiene una deuda de 230 millones de pesos con la AFIP», dijo Yanzón.

Pero, además, tiene varios juicios laborales.

«El accionista mayoritario, Walter De Pellegrin hace dos años que no viene a San Rafael”, agregó.

“Creo que la idea del dueño era llevar la fábrica a la quiebra o dejar que se terminara todo el stock de insumos para dejarla morir”, reveló.

“A mí me ofrecieron la presidencia del directorio para salvar a la empresa y en eso estamos, en proceso de rescatarla”, añadió.

Dijo después que desde la Justicia le aseguraron que la idea es evitar la quiebra para impedir un gran impacto social.

Dejó en claro que la intención es diseñar un plan de pagos con la obra social del STIA.