Peligran 800 empleos en alimenticia La Colina de Mendoza

El Sindicato de la Alimentación denunció que la conservera La Colina no invierte en producción y se encuentra al borde del cierre. Los trabajadores se autoconvocaron en la planta para pelear por sus puestos de trabajo.

El Sindicato de Trabajadores de Industrias de la Alimentación (STIA) denunció que la conservera La Colina se encuentra al borde del cierre y se analiza una posible quiebra. Los dueños no invierten en producción y los trabajadores se autoconvocaron en la planta.

Los empleados de la conservera La Colina se autoconvocaron en reclamo por la inestabilidad laboral. Por la crisis laboral hay unos 800 empleos temporarios en peligro. Aseguraron que si no hay una solución, se pedirá la quiebra con continuidad de trabajo. La salida es algo similar a lo que ocurrió con otra alimenticia, la gigante Alco-Canale.

Rubén Castro, delegado del STIA, aseguró que “hay gente que se autoconvocó porque hay un malestar muy grande». «Aunque parezca mentira, un 30 de enero no se está trabajando, cuando en otros años se estaba en dos turnos y hasta turno noche», dijo Castro.

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Dueño en fuga

Desde el gremio denunciaron que el dueño de la empresa no responde a los reclamos. «El dueño no da la cara, no compró la hojalata que hacía falta, hacen falta 13 millones para comprar hojalata para más durazno, cosa que no apareció» denunció el delegado gremial. «Se va a elaborar mañana (por hoy) y el viernes y pasaría hasta el 14 o 15 de febrero”, explicaron.

Pedido de reunión en Trabajo

El Sindicato de Alimentación pidió reunión con los síndicos y la jueza que lleva la convocatoria. Allí se convocará al dueño para ver qué va a hacer con la fábrica. Una de las alternativas que manejan los trabajadores es pedir la quiebra con continuidad de las fuentes de trabajo. «Que se siga trabajando pero en manos de otra persona, no de Walter de Pellegrin”, pidieron los empleados.

El delegado añadió que “este año no se va a llegar a 2 millones de latas». «La gente solo quiere trabajar, pero al dueño parece que la bicicleta financiera le da más rédito que trabajar esta empresa».

800 empleos en peligro

Según la información de los trabajadores esta fábrica deja de trabajar, son 800 las personas que quedan en la calle. “Vamos a esperar que el Sindicato se reúna con las autoridades y pedir la quiebra con continuidad laboral», aseguró Castro. «Es un malestar grande, son 800 familias que tienen el sustento en esta empresa”, aseguró.

De este modo, una vez que vuelva a funcionar la Justicia, en febrero, se buscará una reunión. De no haber acuerdo, se buscará imitar el proceso judicial de Alco Canale. Es decir alquilar a otra firma para mantener el empleo hasta encontrar un comprador.