Luego de la Conciliación Obligatoria dictada por la Secretaría de Trabajo de Río Negro, el encuentro entre el Sindicato de la Alimentación y la pesquera Río Salado terminó con el compromiso de la empresa de reincorporar a los 54 empleados despedidos
La conciliación obligatoria dictaminada por la Secretaría de Trabajo de la provincia de Río Negro tras las protestas del Sindicato de Trabajadores de la Industria de la Alimentación (STIA) en la planta pesquera Río Salado, de Viedma, tuvo avance positivo con la reincorporación de los 54 despedidos.
«Ahora tenemos un cronograma de pago que no teníamos tampoco, tenemos la fuente de trabajo que se va a reactivar». Indicó Juan Ortiz, secretarío gremial del STIA.
De esta manera el vienes se estaría pagando el 50% de la quincena de abril, el día lunes la estarían cancelando, y el viernes de la semana siguiente estarían recibiendo una ayuda de la provincia de 4.500 pesos cada trabajador.
Por otra parte «en el acuerdo se logró que el 21 de mayo quede cancelada la segunda quincena de abril, y mientras tanto comenzaríamos a trabajar el día de mañana para poder cobrar la primer quincena de mayo» manifestó Ortíz.
Negociaciones pendientes
El secretario gremial de STIA Río Negro, comentó que quedaron reclamos pendientes, como el de 26 contratados a quienes ya se les había finalizado el contrato. La pretensión del sindicato es que se le de continuidad de trabajo a esos compañeros, pero la empresa dijo que como no está operativa y no tiene barcos, porque había llevado todo para cerrar la empresa, por ahora no lo puede hacer. Sin embargo aclaró que «se dejó la puerta abierta para en el futuro analizar esa posibilidad»
Además, el referente local del STIA prometió que «seguiremos trabajando para esos compañeros puedan recibir una ayuda más de la provincia y veremos si en el futuro pueden incorporarse en alguna planta o en Río Salado si es posible».
«Los trabajadores no están conformes con lo que se pretendía en el reclamo inicial, pero tampoco es malo haber recuperado la fuente de trabajo, la reincorporación de los compañeros y esperemos que la empresa se pueda poner en marcha y poder seguir trabajando» contó Ortiz.
«Viene una discusión de paritarias, una reformulación de los proyectos Calme-Río Salado porque se tendrán que adaptar, la cantidad de trabajadores, el procesamiento, la producción, una proyección a futuro que va a hacer la empresa y nosotros tendremos que estar sentados en la discusión y la situación económica e inflacionaria del país también nos lleva a solicitar a las empresas un incremento salarial», concluyó Juan Ortíz.
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