Córdoba: La alimenticia Jumalá echó a una embarazada que pidió licencia por ser de riesgo

Córdoba: La alimenticia Jumalá echó a una embarazada que pidió licencia por ser de riesgo

El Sindicato de la Alimentación (STIA) reclamó que la patronal de la alimenticia Jumalá reincorpore a una empleada despedida cursando un embarazo. Despedida por pedir licencia.

 

El Sindicato de la Alimentación (STIA) reclamó en las puertas de la alimenticia Jumalá.

Es por el despido injustificado de una empleada embarazada de la planta de Córdoba.

El gremio acompañó a los delegados y trabajadores que temen más acciones de la empresa.

Es que la medida de la patronal alerta al resto de la planta de producción de alimentos y  desde el STIA Córdoba ven con preocupación la falta de diálogo de la empresa.

 

Despido de una embarazada

El STIA Córdoba  se acercó hasta las puertas de Jumalá para defender el empleo de esta trabajadora.

Pero, además para impedir que la patronal proceda de la misma forma con otros trabajadores de la planta.

Jumalá, en conflicto con el STIA por el despido de una trabajadora embarazada

 

Es que no es la primera vez que Jumalá incumple condiciones y reglamentos de trabajo pautados.

En este caso se trató de una trabajadora de 20 años de antigüedad.

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Por un pedido de licencia

El proceder patronal fue por un pedido de licencia, días atrás, que pidió tomar la trabajadora de la planta.

La solicitud de la empleada fue por tratarse de una persona considerada «grupo de riesgo».

La denunciante ni siquiera recibió el permiso de la patronal.

Además, la empresa pidió su cesantía permanente, y la despidió.

Así, la patronal incurrió en la ilegalidad porque está prohibido echar empleados en pandemia.

 

STIA se paró de manos

Desde el gremio, Eduardo Cornejo denunció a la patronal y defendió a la empleada.

«La compañera notificó su embarazo al tercer mes y notifica también que necesitaba ser dispensada por la resolución 207 nacional por ser grupo de riesgo», explicó Cornejo.

Cornejo explicó que la empresa «no toleró esa situación de tener que pagarle a un trabajador por quedarse en su casa».

En tal sentido «decidieron despedirla con causas totalmente inventadas sucedidas el año pasado para no pagar indemnización», dijo Cornejo.

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