Desopilante: para la COPAL las alimenticias no son responsables de la inflación
El presidente de la Copal volvió a desprender a las grandes alimenticias de la inflación.
A pesar de haber movilizado aumentos todos los meses, el presidente de la Coordinadora de Empresas Alimenticias (COPAL), Daniel Funes de Rioja, aseguró que “las alimenticias no tienen responsabilidad en la suba de los precios”.
Pese a los constantes aumentos que empujaron las subas mensuales, la COPAL, les quitó responsabilidad.
No se trata de la primera vez que Funes de Rioja justifica a los grandes empresarios del sector.
El vicepresidente de la Unión Industrial Argentina (UIA),aseguró ayer que «las alimenticias no tienen responsabilidad en las subas de precios».
Es más, remarcó que el sector «vive un momento de fuerte retracción por la caída del consumo».
“La responsabilidad de la suba de precios por parte de las empresas es inexistente», repitió Funes de Rioja.
Los argumentos de la COPAL
El vice de la UIA agregó: «doy dos argumentos que son indiscutibles: uno que las pymes y las economías regionales están atravesando un momento de mucha dificultad y nula rentabilidad. El otro es que las grandes empresas están con números en rojo”, indicó.
Para la COPAL ese argumento es suficiente para justificar la inflación despiadada a la que someten a los trabajadores.
El empresario, que acusó en más de una oportunidad a los gremios, por la inflación, no habló de las ganancias empresarias.
Es que las gigantes del sector en 2018 subieron precios casi 20 puntos por encima de la inflación.
«La menor inflación posible»
Además, Funes de Rioja insistió en que las empresas buscan que haya estabilidad y la menor inflación posible.
“La estabilidad y la baja inflacionaria serían una bendición del cielo para las empresas porque le darían previsibilidad al negocio”, aseguró.
Para la patronal el problema es el salario
Funes de Rioja señaló los factores que para los empresarios motivan la inflación.
El referente alimenticio apuntó entre los factores a «la fuerte presión impositiva, y los costos de logística y laborales».
Es decir, que los salarios le salen demasiado a los empresarios.
“Tenemos un menor consumo y también una mayor informalidad”, manifestó Funes de Rioja.
El presidente de la COPAL hace tiempo reclama una reforma laboral que reduzca la capacidad salarial atacando los convenios colectivos.
Funes de Rioja señaló que la postergación de la implementación de la reforma impositiva mantiene una fuerte presión fiscal del 40% en alimentos y más del 50% en bebidas. “Hoy media botella de agua mineral es impuesto”, describió.
Pero además sumó que el costo logístico representa entre un 14 y un 30 por ciento “que es de los valores más altos del mundo”.
Precios esenciales
Funes de Rioja resaltó finalmente que los programas de Precios Cuidados y Precios Esenciales “tienen el acompañamiento de la industria».
Hemos garantizado el abastecimiento y los precios. Hoy están llegando a todos lados, salvo algunas excepciones”, aseguró.
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