La FTIA rechaza el DNU de Milei y declara el estado de Alerta y Movilización
La Federación de Trabajadores de Industrias de Alimentación declaró el estado de Alerta y Movilización para trabajadoras y trabajadores de la Alimentación, en rechazo al Decreto de Necesidad y Urgencia de Javier Milei.
La Federación de Trabajadores de Industrias de Alimentación declaró el estado de Alerta y Movilización para trabajadoras y trabajadores de la Alimentación tras el anunció realizado por Javier Milei.
La medida fue determinada por el Consejo Directivo de la Federación de Trabajadores de la alimentación (FTIA), «ante el brutal ajuste al pueblo y el conjunto de la clase trabajadora que expresa el DNU anunciado por el Presidente de la Nación, y el espurio intento de favorecer a los sectores más económico que representa».
Además, la FTIA «expresa su total rechazo al DNU anunciado por el Presidente de la Nación, porque representa un brutal ajuste a toda la población, lesiona el espíritu democrático, altera la división de poderes, agravia los derechos de Trabajadores/as y favorece espuriamente a los sectores económicos más concentrados».
«Este Decreto de Necesidad y Urgencia anunciado, claramente pretende hacer recaer sobre las espaldas de la población y los trabajadores/as la responsabilidad de la crisis económica que afronta, vulnerando derechos socio-laborales adquiridos y pretendiendo desarticular las representaciones gremiales, para avanzar en detrimento de un salario digno y la solidaria prestación sanitaria que siempre fueron garantizados por el conjunto de los trabajadores/as a través de sus organizaciones representativas», sostiene el comunicado de la federación que dirige Héctor Morcillo.
«Una vez más, los mezquinos intereses de los sectores económicos, garantizados esta vez por un gobierno liberal, pretende convertir el salario de trabajadoras y trabajadores en la variable de ajuste económico», declama el comunicado.
El documento destaca «algunas de las medidas contenidas en este DNU en contra de los trabajadores/as»:
- Elimina la relación de dependencia en establecimientos de hasta 5 trabajadores ya que los considera “colaboradores”, sin ningún tipo de derecho de índole laboral.
- Se amplía el período de prueba a 8 meses (de los 3 actuales) con todas las limitaciones que ello conlleva al contrato de trabajo.
- Se posibilita la desregulación totalmente de la jornada laboral vía negociación colectiva, con el único límite de 12 horas de descanso entre jornada y jornada.
- Facilita la tercerización laboral en las empresas, desligando al principal empleador de sus responsabilidades.
- Se convalida la utilización del monotributo como un contrato de trabajo.
Te puede interesar –> La CGT cierra filas contra el avance de la derecha