Funes de Rioja respalda el plan económico de Guzmán
El presidente de la UIA y de la COPAL, Daniel Funes de Rioja, ponderó el modelo del ministro de Economía y reclamó que no sumen impuestos a los empresarios.
«La hoja de ruta de Guzmán tiene consistencia, tenemos buen diálogo», sostuvo el referente de las industrias alimenticias, Daniel Funes de Rioja.
El presidente de la Unión Industrial Argentina respaldó la gestión de Martín Guzmán, aunque se manifestó en contra de la suba de impuestos y de la creación de nuevos tributos.
Esto en el marco del debate por la implementación del impuesto a la renta inesperada.
“Tenemos buen diálogo con Martín Guzmán”, afirmó el dirigente empresario en declaraciones a Futurock.
Con el apoyo de los empresarios y tras la salida de Feletti de la Secretaria de Comercio, un representante del kirchnerismo duro, el titular del Palacio de Hacienda, parece haber fortalecido su posición y logrado mayor autonomía para la toma decisiones y la ejecución de medidas.
Menos impuestos
Funes de Rioja aprovechó su aparición pública para marcar su postura contra cualquier posible suba de retenciones o un impuesto bajo la figura de «aporte a la renta inesperada»
«Nuestra posición es no más impuestos, el primer beneficiario por la elevación de los precios internacionales es la propia nación por los impuestos que cobra» y lanzó que «como suben los commodities suben los insumos, este análisis hay que hacerlo con mucha serenidad», señaló el representante empresario.
«No es que todas las empresas pagan 160 impuestos pero hay una red de impuestos que es bastante gravosa y por ende me parece que eso es suficiente», sentenció.
Cabe destacar que en la mayoría de los países centrales se están implementando nuevos impuestos y controles de precios a fin de balancear las cuentas públicas y destinar fondos sociales a los sectores más afectados por la crisis financiera internacional.
De hecho, ayer se conoció la noticia que el Reino Unido lanzó un impuesto a la renta extraordinaria para financiar ayudas sociales.
El gobierno de Boris Johnson presentó un paquete de medidas que incluye un impuesto temporal del 25% a las gigantes energéticos que se beneficiaron por la suba de los precios internacionales.
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