La herencia de Macri: 80% de los hogares no cubren la canasta básica

El INDEC reveló el dato esta semana y dejó registro de la debacle económica y social en que la que el gobierno de Mauricio Macri sumió al país. Mientras, el bloque de Cambiemos, en Diputados, votó contra la sanción de la emergencia económica.

El Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) reveló que 8 de cada diez hogares de nuestro país no alcanzan a cubrir la canasta básica de alimentos. Se trata de un dato revelado sobre la población ocupada.

El registro elaborado por el organismo estadístico delata la profunda crisis en la que hundió al país la gestión Cambiemos, y la falta de voluntad política que en la actualidad tiene para recuperar la economía.

Es que durante la votación sobre la Emergencia Económica, que apuntaba a recomponer el salario de buena parte de los trabajadores y trabajadoras nacionales, el bloque entero de la (ahora) oposición votó en contra de la sanción.

La actitud del bloque de Cambiemos denota que la pauperización de las condiciones de trabajo, la caída del salario, el derrumbe del consumo interno, y la caída industrial no fueron un error, sino mas bien algo planificado.

Un plan de destrucción que sigue en el Congreso

El plan de gobierno de la gestión Macri, continuó esta semana desde el parlamento, con la actitud de los legisladores de Juntos por el Cambio, que decidieron, por unanimidad, rechazar el proyecto de Ley, de Solidaridad Social y Reactivación Productiva.

“El interbloque de Diputados de Juntos por el Cambio decidió por UNANIMIDAD no acompañar una ley que significa anular el Congreso Nacional delegando todas sus funciones constitucionales en el Poder Ejecutivo Nacional”, justificaron en un comunicado.

Sin embargo el real motivo es que la oposición no quiere reconocer que dejó “tierra arrasada”, como se desprende de la ley ya que el mensaje del Poder Ejecutivo subraya la “dramática situación económica y social que atraviesa” el país.

Por eso, apenas se conoció la intención de enviar un proyecto de recuperación productiva y recomposición del tejido social, los representantes de Cambiemos buscaron, en bloque, no dar quórum a la iniciativa del gobierno de Alberto Fernández.

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La negación como método

Ya durante la gestión de Mauricio Macri, los representantes y funcionarios del anterior gobierno se dedicaron a rechazar cualquier intento de reactivación productiva, desde la recuperación del salario de los trabajadores y trabajadoras.

Desde la administración de gobierno se dedicaron a avalar que las grandes empresas “ninguneen” las negociaciones paritarias, el instrumento del movimiento obrero para batallar la pérdida del poder adquisitivo.

Es más, ante el derrumbe productivo y económico la única reacción fue la de crear acuerdos “maquillados” para congelar el aumento generalizado de precios, que no tuvo resultados reales en el bolsillo de los más afectados.

La falta de interés para combatir la inflación quedó marcada el 12 de agosto de este año, cuando, tras haber perdido las elecciones primarias, Mauricio Macri dejó avanzar una devaluación del 23%, sin intervención del Banco Central.

Ello repercutió en aumentos generalizados de precios que tuvieron su impacto en el aumento del costo de vida, y de la canasta básica alimenticia, para la totalidad de los trabajadores, y que ahora el INDEC registró en sus mediciones.

Ocho de cada diez hogares

Los datos del INDEC corresponden al tercer trimestre de 2019, período en el que impactó la última devaluación alentada y permitida por el gobierno de Mauricio Macri, y avalada por los diputados que hoy se oponen a recomponer el salario de los trabajadores.

Según el organismo el 10% más pobre de la población recibió en el tercer trimestre del año apenas el 1,3% de los ingresos y el 10% más rico concentró 33,2%, por lo que la distribución de la riqueza empeoró 5,9% interanual.
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Es decir que casi el 80% de la población ocupada tenía ingresos individuales por debajo del costo de la canasta para una familia tipo, que en septiembre último era de $ 34.784.

La pesada herencia del macrismo

Por su parte, el 50% de los hogares tampoco cubría ese monto, al llegar a una media de hasta $ 34.270. De acuerdo con la Encuesta Permanente de Hogares (EPH), el ingreso promedio per cápita fue en ese período de $ 16.571 mensual.

Por eso el Coeficiente de Gini, que estima mayor desigualdad cuanto más se aleja de la base cero, se deterioró en los últimos doce meses al pasar de 0,424 en el tercer trimestre del año anterior a 0,449 en la última medición.

Los datos oficiales reflejan el impacto producido por la crisis económica y la devaluación, ya que según ese coeficiente el deterioro de la distribución del ingreso llega al 3,4% desde diciembre último, y al 5,9% en los últimos doce meses.

Según las escalas de ingreso individual de la población ocupada, hasta el octavo decil, que suma más de 9 millones de personas, tenían ingresos mensuales per cápita promedio de entre $ 3.200 y $ 31.152, por debajo del costo de la canasta.

La pobreza que dejó Macri

Entre los hogares, los ingresos promedio de todo el grupo familiar se ubicaron entre los $ 9.131 y los $ 34.270, entre el primer y el quinto decil, también por debajo del costo de esa canasta mínima de alimentos.

Según el ingreso per cápita familiar de la población total, el sector más pobre de la población tenía ingresos medios de $ 2.378 en el decil más pobre y de $ 55.042 en el más rico.

Así, se va alineando un plan de pauperización de los trabajadores, que Cambiemos planea continuar en el Congreso.

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