La Copal pide tiempo para cumplir con la ley de Etiquetado Frontal

Las empresas de alimentos piden tiempo para cumplir con la Ley de Etiquetado y argumentan que quieren ver la letra chica de la norma que entra en vigencia en marzo.

La ministra de Salud, Carla Vizzotti, recibió a los representantes de las cámaras empresarias a fin de coordinar la implementación de la Ley de Etiquetado Frontal.

Las grandes compañías de alimentos y bebidas reclaman aplazar la instrumentación de la norma para adecuarse a los octógonos.

Los empresarios se resisten a adaptarse a una regulación que los obliga a advertir a los consumidores sobre componentes perjudiciales para la salud que poseen los productos que comercializan.

Les toca cumplir

El Ministerio de Salud presentó a las empresas alimenticias un borrador de la reglamentación de la Ley de Etiquetado Frontal.

La ministra Carla Vizzotti sostuvo que habrá exenciones para casos puntuales en los que no se pueda cumplir con los plazos, pero que la letra chica no flexibilizará los tiempos previstos por la norma que sancionó el Congreso.

Las compañías alimenticias, fuertemente cuestionadas por su rol en la formación de precios y los aumentos injustificados que motorizan la inflación, se oponen a una Ley que busca cuidar la salud de la población.

Además, de forma reciente, las grandes empresas fueron denunciadas por realizar cambios de envases, lanzar «nuevos» productos y manipular la presentación en las góndolas para burlar las fiscalizaciones de precios y cobrarle más a los consumidores.

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Quieren tiempo para adecuarse

Salud informó en una reunión de la que participaron representantes de la Coordinadora de Industrias de Productos Alimenticios (Copal), a la Cámara de la Industria de Bebidas sin Alcohol (Cadibsa) -dominada por las fabricantes de gaseosas- y al Centro de la Industria Lechera (CIL), que sí dará margen para alguna adecuación puntual.

Las empresas alimenticias resaltan como punto problemático el stock existente.

Esto involucra no solo a la mercadería que ya está en la góndola, sino a los envases y etiquetas que están en proceso de fabricación para ser puestos en el mercado en los próximos meses.

Una Ley para cuidar a los consumidores

La Ley de Etiquetado frontal supone un duro golpe para un sector que no está acostumbrado a las regulaciones.

Es que la norma no será fácil de transgredir y una vez que los consumidores se acostumbren a leer las advertencias, notarán cualquier tipo de incumplimiento.

La ley utiliza los parámetros de la Organización Panamericana de Salud (OPS), que las empresas juzgan demasiado estrictos.

Es que la regulación otorga a los consumidores herramientas para tomar mejores decisiones en términos de salud y un marco legal para proteger que se cumplan sus derechos.

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