La Copal busca boicotear el intento del Gobierno de frenar los aumentos

El presidente de la Coordinadora de Empresas Alimenticias (Copal) llevó la voz de las empresas del sector al gobierno y decidió entorpecer las medidas para frenar las subas de precios en un contexto de descontrol inflacionario que empobrece cada día a más argentinas y argentinos.

La COPAL salió a entorpecer las medidas del Gobierno para frenar la suba de precios.

Es que claro, son las alimenticias las que se vienen beneficiando con subas constantes.

Ello, mientras miles de argentinos se hunden en la pobreza, por las subas de alimentos.

Sucede que las subas en la canasta definen si una familia puede acceder a los bienes de consumo básicos.

Desde la entidad que conduce Daniel Funes de Rioja afirmaron que en la convocatoria realizada por la Secretaria de Comercio Interior «no están garantizadas las condiciones para conciliar las posibilidades de los sectores frente al pedido de estabilización de precios».

Poner palos en la rueda

La Coordinadora de las Industrias de Productos Alimenticios de Argentina (COPAL), que lidera Daniel Funes de Rioja, emitió este martes un comunicado en el que puso en duda «las condiciones» para alcanzar un acuerdo de precios, a horas de una nueva reunión clave con el Gobierno nacional.

La entidad ratificó su “voluntad de colaboración y diálogo para el acuerdo”.

Pero aclaró que en la convocatoria realizada “no están garantizadas las condiciones».

Ello, para conciliar las posibilidades de los sectores frente al pedido de estabilización de precios”.

“A pesar del esfuerzo realizado por las empresas en enviar sus propuestas de participación, las mismas no fueron tenidas en cuenta, así como tampoco fue considerado el pedido de generar un espacio de intercambio en lo inmediato, que permita clarificar las realidades y posibilidades de los distintos sectores y encontrar en conjunto un acuerdo sostenible”, destacaron desde la entidad.

Victimización patronal

El titular de la Copal, tiene prevista una reunión con el secretario de Comercio, Roberto Feletti.

Ello tras un compás de espera de 12 horas desde la reunión que mantuvieron este lunes.

La Copal se presentará una vez más, victimizando a las grandes empresas alimenticias y con la amenaza de que un control de precios puede provocar desabastecimientos.

Según el lobbysta De Rioja, los datos del INDEC evidencian que no es la Industria de Alimentos y Bebidas (IAB) la que tracciona mayoritariamente en la inflación general.

«Muestra de ello es que el IPC de septiembre se incrementó un 3,5%, mientras que el IPC de alimentos y bebidas lo hizo por debajo de esta cifra, alcanzando un 2,9%», señala el comunicado.

“El argumento de que la inflación se aceleró por los aumentos de la categoría de productos de alimentos y bebidas pierde sentido ya que existen otras divisiones cuyos precios crecen por encima del Índice IAB y del Índice General”, afirmó Funes de Rioja., que en este sentido criticó «la amenaza de la aplicación de la Ley de Abastecimiento y las manifestaciones sobre codicia».

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