Ni el «círculo rojo» apoya las políticas de Macri
En los últimos días comenzaron a manifestarse los representantes del sector patronal sobre el período de transición que estamos viviendo en Argentina de cara a las elecciones generales. La patronal ya huele el cambio de gobierno y Macri queda solo.
Aunque el escenario hubiera parecido inverosímil hace algunos meses, cuando el presidente Mauricio Macri reunía al sector patronal para apoyarlo en el tramo final de la campaña, las señales de cambio comenzaron a salir a la luz
En este sentido, el sector empresario comenzó a pronunciarse a favor de un cambio de políticas para el país y de un cambio de gobierno, luego de las elecciones primarias (PASO), y a favor de algunas de las definiciones del candidato Alberto Fernández.
Incluso a aquellos referentes del sector de los más grandes empresarios nacionales como Daniel Funes de Rioja, quien siempre se mantuvo cerca, y en apoyo a las políticas de Mauricio Macri, se lo vio tendiente a redirigir las miradas al nuevo gobierno.
El grupo de WhatsApp se vacía
Hasta en los grandes medios de comunicación nacionales salieron a promover la idea del apoyo de los empresarios, “por naturaleza” al presidente de la Naciòn, Mauricio Macri, antes de las elecciones de agosto.
La estrategia comunicacional, tejida al mejor estilo Duran Barba, se derrumbó horas después de las 9 de la noche del once de agosto de este año, cuando los números de la elección sepultaban las aspiraciones de Macri bajo un aluvión de votos a Fernández.
El festejo desmedido y la operación de prensa sobre el grupo de Whatsapp del presidente Macri con los empresarios nacionales comenzó a desintegrarse al ritmo de la salida de los CEOs amigos del Presidente del mentado grupo.
Pocos días más tarde de la elección empresarios de la talla de Martín Cabrales, Daniel Funes de Rioja y de hasta el propio Luis Pagani, de Arcor, comenzaron a mostrarse a favor de un cambio de rumbo político.
Es más, varios medios salieron a difundir que los CEOs responsabilizan directamente a Mauricio Macri por la crisis económica.
Garrochismo patronal
En un principio, desde el sector alimenticio, uno de los mas influyentes dentro de la Unión Industrial Argentina (UIA), aparecieron varios pesos pesados que salieron a mostrarse proclives a negociar un nuevo modelo de reactivación del consumo interno.
Martín Cabrales, Luis Pagani y Daniel Funes de Rioja vieron los resultados de las elecciones primarias como un mensaje irreversible para el oficialismo, y comenzaron a tejer el diálogo con la fuerza política con más chances de llegar a la Rosada en octubre.
“Me parece que hay cuestiones que venimos señalando desde el empresariado que deben constituir políticas de Estado para la previsibilidad, para la inversión, para el desarrollo y el crecimiento de la Argentina”, sostuvo el representante de la UIA, Daniel Funes de Rioja.
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“Y, por otro lado, en materia de contención de los problemas sociales”, continuó Funes, quien aseguró, más tarde que “celebramos que Alberto Fernández haya abierto diálogos”, a pesar de haber apostado a la reelección de Mauricio Macri, antes de las PASO.
Coloquio de IDEA
Tal fue el giro de la patronal que en el Coloquio de IDEA, en Mar del Plata, gremialistas y empresarios coincidieron en un debate en la necesidad de alcanzar un pacto social. Este año quedó en evidencia el sector organizacional demostró un alejamiento del Gobierno.
“Los sindicatos y las empresas ante los nuevos paradigmas” fue el nombre del panel que reunió a dirigentes de uno y otro ámbito. El encuentro se realizó a pesar de la ausencia de los candidatos presidenciales.
En representación del mundo gremial, estuvieron Gerardo Martínez, (Construcciòn); Sergio Palazzo, (Bancarios); Alejandra Darín, (Actores), y Hugo Yasky, de la CTA, que ofició de moderador.
En tanto, por el mundo empresarial estuvieron Javier Goñi, CEO de Ledesma; Daniel Herrero, presidente de Toyota, y la periodista Elizabeth Peger.
Uno de los temas que se puso en discusión fue la convocatoria a entablar un pacto social que realizó Fernández. En referencia a este llamado, Martínez consideró necesario “trazar un plan maestro” entre la patronal y los trabajadores.
Ello se debe lograr contando con la voluntad política del Gobierno, para alcanzar “una visión estratégica de la economía vinculada con el desarrollo”.
Diálogo y consenso
El representante de la UOCRA también destacó que “hoy lo que nos falta es transformar el diálogo en una política de Estado”. Tras haber dicho esto, el dirigente gremial concentró sus críticas en la administración de Macri.
“Estamos cerca del abismo y con peligro de desmoronamiento. Esto vemos los trabajadores. No se por qué se han perdido cuatro años, porque estamos en una situación peor”, dijo Martìnez.
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A su turno, Goñi reflexionó sobre la situación actual y puso énfasis en que deben de dejarse de lado los egos. Al respecto, señaló que “muchas negociaciones se frustran por ver quién es más importante, quién gana”.
Sin embargo, en estas disputas “siempre pierde la gente”. “Hay un interés común que nos tiene que aunar como líderes responsables. Cómo encontramos esos puntos en común para ir transformando esto en acuerdos y finalmente en hechos”, añadió.
Yasky, por su parte, consideró que “hay que refundar el contrato social para poder definir de conjunto objetivos que tienen que ver con el bienestar general. No hay empresario o trabajador que pueda realizarse si no es un marco de mínimo auspicio de bienestar general”, opinó.