Alimenticias anunciaron mas aumentos por la devaluación

Los supermercados salieron a hablar de la existencia de un «dólar góndola», un tipo de cambio diferenciado de las alimenticias. Según las empresas del sector falta trasladar un 25% de la devaluación a precios. Los CEOS avizoran un segundo semestre recesivo.

Las principales empresas del sector alimenticio anunciaron que aún resta trasladar a precios un 25% de la devaluación del mes de junio.

Desde las compañías más importantes aseguran que los actuales valores de los productos no reflejan el verdadero impacto que la devaluación tuvo en sus gastos y anticiparon nuevas subas.

Afirman que la situación del mercado no les permite trasladar el total de los costos a precios.

Pese al 3,7% de inflación de junio y en el marco de un dólar que ya trepó 53% en lo que va de 2018, los precios de los alimentos aún tienen un largo trecho por recorrer, dicen desde las empresas del sector.

Para las alimenticias la mayoría de los productos exhibidos en las góndolas acumulan un retraso cercano al 25%.

Así lo aseguran las empresas alimenticias más grandes del país, que adviertenque el valor que actualmente pagan los consumidores por los artículos contempla un dólar cercano a los $22,50. Es decir, bastante lejos de los más de $28,00 a los que cotiza la divisa estadounidense en estas jornadas.

Ver también: Alimenticias niegan impacto de la devaluación en precios

Dólar «Góndola»

Según referentes del sector consultados por el medio digital «IProfesional«, el precio de la mayoría de los alimentos se mantendrá atrasado en lo que resta del año.

Las compañías y cadenas de hipermercados ya le pusieron un nombre al tipo de cambio que utilizan en la actualidad: «dólar góndola».

Se trata de la cotización a partir de la cual negocian a diario con proveedores la compra de mercadería, en el marco de listas de precios que entre enero y este mes ya fueron modificadas al menos en cuatro ocasiones.

Con todo, las alimenticias aclaran que todos esos retoques no alcanzan para cubrir la fuerte suba de costos. Y señalan que se ven imposibilitadas de trasladar esos incrementos a los precios finales, ya que la demanda no lo convalidaría, a raíz de la pérdida acumulada del

poder adquisitivo.

La palabra de las alimenticias

«Tenemos que subir de a cuenta gotas porque es imposible vender a los valores reales. Es decir, a los que reflejarían el impacto que ha tenido la suba del dólar, la paritaria y la inflación acumulada en nuestra cadena de costos», admiten desde uno de los mayores grupos alimenticios del país.

«El nuestro es un escenario parecido al de las naftas, que suben pero no lo suficiente para alcanzar al dólar ni a la inflación, que ya apunta a ser del 30% este año», sostiene el gerente de una de las alimenticias locales con mayor poder de mercado.

Las grandes compañías del rubro que anticiparon este desfase son Molinos Río de la Plata, Arcor y otras grandes referentes de la industria local.

Recesión en el segundo semestre

En el sector advierten que los próximos meses serán muy similares a lo observado hoy día. Es decir, que habrá remarcaciones periódicas pero siempre atrasadas respecto a los precios que debieran corresponder.

Esto producto de un contexto recesivo que irá dejando su huella en lo que resta del año, tal como lo reconocen desde todas las ramas de actividad y también desde el propio Gobierno: «Ahora acumulamos 25%, más que nada por la segunda ola devaluatoria de junio», señalan desde una de las alimenticias que compra harina de trigo para la elaboración de productos.