La calificadora de riesgo internacional Morgan Stanley a Argentina como “economía emergente”
El presidente de la Coordinadora de las Industrias de Productos Alimenticios (Copal), Daniel Funes de Rioja aseguró que la categorización del país como «economía emergente», por parte de la calificadora de riesgo internacional Morgan Stanley, «es un dato importante y positivo».
La reclasificación argentina es «un dato muy importante y positivo que alienta a los grandes fondos de inversión del mundo a invertir», dijo el empresario alimenticio, en calidad de vicepresidente de la Unión Industrial Argentina (UIA).
Para Funes de Rioja la clasificación del mercado de Argentina como «emergente» es «un elemento fundamental de confianza de contexto» en el país que alienta a los grandes fondos de inversión a invertir en la economía real.
«La reclasificación (de mercado «de frontera» a «emergente») es un dato muy importante y positivo que alienta a los grandes fondos de inversión del mundo a invertir, no en el sector financiero puro, sino en la economía de la producción y del empleo y de la exportación que es donde Argentina tiene que ir», declaró a Télam.
Es la «reinserción» de la economía emergente
La confianza comenzó a lograrse en 2016 «cuando Argentina renegoció con los holdouts y empezó a volver al mundo; cuando se le dio le liderazgo del G20 y ahora con las negociaciones con la OCDE donde aspira a ingresar a ese círculo deseable de países desarrollados», apuntó Funes de Rioja.
Dijo que esas señales de confianza del contexto se dieron «hasta que la crisis financiera obligó a recurrir al Fondo Monetario Internacional (FMI).
«Todas han sido señales positivas a pesar de la volatilidad y la burbuja financiera», agregó el presidente de la coordinadora de alimenticias.
Ojo donde van
Funes de Rioja, aseguró, sin embargo, que las inversiones deberán realizarse teniendo como eje la producción, y no la especulación financiera.
«Hay que ver qué tipo de inversiones. Algunas son de maduración muy rápida que se pueden dar en dos años y otras son más lentas. Nosotros, pasado este primer semestre vamos a estar viendo claramente esas inversiones que rondan entre los dos y cinco años», comentó.
Productividad para alimenticias
El titular de la COPAL se refirió a las empresas alimenticias y remarcó que la industria está trabajando «en el 60% de la capacidad instalada y no sube» su productividad.
«El mercado está complejo. Hay que actuar con prudencia. Aspiramos a que toda la cadena de comercialización también tenga en cuenta esa circunstancia» concluyó Funes de Rioja.
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