Alijor: una buena noticia para 300 familias

La rápida gestión de los directivos del STIA permitió que se de marcha atrás con el cierre de la fábrica Alijor

Los 300 trabajadores de Alijor vivieron un martes frenético. Luego de varios días de conflicto por el reclamo del pago de haberes atrasados, el dueño de la empresa decidió anunciar el cierre de la fábrica. Los directivos del STIA junto con los miembros de la CRI y delegados lograron que se de marcha atrás con la drástica decisión.

Los miembros del Consejo Directivo, Gustavo Salas, Miguel Acosta y Marcos Mantelli, junto a la comisión interna y congresales, formaron parte de las negociaciones con la empresa para arribar a una solución.

El acuerdo incluyó la firma de un acta por la cual la empresa se compromete a pagar los haberes adeudados y los trabajadores levantan las medidas de fuerza  y regresan a los puestos de trabajo.

El detonante del conflicto

Los trabajadores de Alijor, pertenecientes al Sindicato de Trabajadores de la Industria de la Alimentación (STIA filial Buenos Aires), decidieron por medio de una asamblea de trabajadores, iniciar un paro de actividades a partir del día viernes 6 de abril.

El conflicto se desató por el atraso en el pago de haberes, un problema que ya habían tenido antes y el cual se sumaba a otros incumplimientos de la empresa.

La empresa hizo oídos sordos a este reclamo, y la sucinta respuesta por parte del dueño de Alijor fue que los pagos se efectuarían el  día 9 de abril.

La contestación fue interpretada como un nuevo avasallamiento de los derechos de los trabajadores por parte de la empresa, por lo que la medida de fuerza recrudeció.

Ante la escalada del conflicto, a respuesta del dueño de la empresa fue anunciar el cierre de la fábrica y dejar 300 personas sin trabajo.

Trabajo conjunto de trabajadores, CRI y directivos

La Comisión Interna de la fábrica compuesta por Mauricio Ayala, Nicolás Piñas, Adrián Trejo, Lucas Vallejo y César Silva, encabezó el manejo del conflicto y  decidió actuar en función de las resoluciones de la asamblea, es decir el voto de los trabajadores.

Durante el turno noche del domingo, se resolvió por voto de la mayoría continuar con la medida de fuerza a pesar de las presiones del Jefe de Personal.

El planteo de los trabajadores, en respuesta al representante de Alijor, fue que levantarían la medida una vez que la empresa cumpla con su compromiso. Los trabajadores del turno mañana ratificaron la determinación de los compañeros del turno anterior y decidieron continuar con la medida de fuerza ya que a  las 11 de la mañana y  aún no se acreditaban los sueldos.

La Comisión Interna se encargó de liderar las gestiones, y ya el día lunes se sumaron los miembros del Consejo Directivo, quienes se apersonaron para calmar las aguas y acompañar a los trabajadores en las puertas del establecimiento en una vigilia pacífica para lograr que se reabra la fábrica.

Gustavo Salas, Miguel Acosta y Marcos Mantelli, le dieron soporte al trabajo que venían realizando los miembros de la Comisión Interna.

La resolución

Luego del anuncio del cierre de la fábrica, los miembros de la comisión directiva del STIA y de la Comisión de Relaciones Internas de la fábrica, lograron ingresar a la planta y reunirse con el gerente de recursos humanos de Alijor para intentar destrabar el conflicto.

Durante la reunión se buscaron puntos de acercamiento para avanzar en las negociaciones. Finalmente se llegó a un acuerdo para que se suspendan las medidas de fuerza y no se cierre la fábrica; por lo que los 3oo trabajadores de Alijor pueden volver a partir de hoy mismo a sus puestos de trabajo. El acta firmado por la empresa establece el compromiso de pagar los haberes adeudados a la fecha  y a cumplir los plazos de pago en el futuro.

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