CGT: a pesar de Macri, los trabajadores tienen los pies en la tierra

Mientras Macri describía un país que no es Argentina en el Congreso, donde dijo que bajó la inflación y la pobreza, cuando la suba de precios de 2018 fue la más alta en 27 años, la CGT definió movilizar contra la política económica. Manto de realidad al reclamo de la sociedad.

La Confederación General del Trabajo (CGT) respaldó el pedido de los gremios industriales que la conforman y finalmente irá a una movilización contra la política económica del gobierno de Mauricio Macri.

La determinación responde a un reclamo que hicieron los sindicatos del sector tras evaluar los despidos, cesantías, cierres de fábricas incumplimientos, deterioro del salario, intento de avance de la reforma laboral que sucedieron en diferentes rubros.

“El jueves que viene vamos a convocar a los sindicatos industriales y a las cámaras empresarias del sector productivo para coordinar en ese colectivo la marcha”, manifestaron desde la central obrera en respuesta al pedido de apoyo de los referentes industriales.

Antes, sindicatos como la Unión Obrera Metalúrgica, los textiles de la AOT y Alimentación (STIA) habían realizado un encuentro para exigir que se definiera una acción de protesta contra las políticas del gobierno de Macri, que están pauperizando el salario cada vez más.

Será ‘Por la producción y el trabajo’ y ‘Sin empresas ni trabajadores no hay país’ y al final le entregaremos un documento a Sica para exigir un cambio en la política económica”, contó Rodolfo Daer, secretario de Política Industrial de la CGT.

En la central se estima que la convocatoria será masiva y se llevará a cabo entre los últimos días de marzo y la primera quincena de abril.

Macri, hablando de un país que no es Argentina

La medida contrasta con el discurso que el presidente Macri emitió ayer viernes en la apertura de las sesiones ordinarias del Congreso nacional. Allí, el mandatario, aseguró que su gestión bajó la pobreza y la inflación, algo que suena descabellado para quien lo oiga.

Claro, Macri se refería a los primeros dos años de gestión de su gobierno, cuando las pésimas condiciones económicas aún no habían estallado pauperizando salarios y generando despidos. Más específicamente su discurso le apuntaba al 2017.

Sin embargo, en 2018, la megadevaluación de la moneda nacional y las exigencias del Fondo Monetario Internacional, al que esta gestión acudió sin que nadie la obligue, fue la que impactó en las condiciones de vida de los trabajadores.

Esos dos hechos determinaron el derrumbe del consumo, el cierre de plantas fabriles, despidos, caída del poder de compra del salario y caída de la producción sin precedentes. De hecho la propia UIA denunció que las industrias tienen un 40% de capacidad ociosa.

Ni el Indec salva a Cambiemos

Pues bien, de ello el presidente Macri evitó hablar y, de hecho, mintió, porque ni siquiera durante los dos primeros años de su gestión bajó la pobreza, sino todo lo contrario, porque aumentó del 30% al 32,3%, según los datos del propio INDEC.

Ahora bien, durante 2018 todos esas cifras empeoraron al punto que los indicadores de “salud” del sistema económico local daban negativos mes a mes. La medición de la canasta básica, el salario real y los datos de inflación y pobreza ahondaron la ya alarmante situación.

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Sin ir más lejos en noviembre el Indec informaba que la producción de la industria de Argentina se derrumbó 11,5% en septiembre en la medición interanual. La propia Unión Industrial registró un retroceso interanual del 9,4%.

Ni siquiera el primer mes de este 2019 dio descanso, puesto que mientras desde Cambiemos auguraban una baja de la inflación, las cifras del propio Indec marcaron que el valor llegó a 3,7% mensual, superando al valor de diciembre y con proyección de más aumento en febrero.

Es más, el dato más impactante es que la inflación de 2018 fue la más alta en 27 años.

De esa gravedad de la crisis económica no se salvaron las PyMEs y mucho menos los trabajadores. Es por eso que, buscando dar un manto de realidad a lo que se vive en nuestro país, la CGT respaldó la realización de una movilización contra la política económica.

Con los pies en la tierra

Mientras el presidente dio un discurso que parecía describir más la situación que vive en Suiza, cuando viaja a Davos, desde la CGT respondieron a las demandas del movimiento obrero que, con los pies en la tierra, sufre las condiciones económicas locales.

Por eso el lunes en la CGT los gremios industriales elaboraron un diagnóstico común de la crisis de la actividad productiva, con cierres de fábricas, despidos, suspensiones, procedimientos preventivos y un descenso del uso de la capacidad instalada del 50 por ciento.

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“Mañana vamos a solicitar una marcha de los cuerpos orgánicos para instalar en la agenda política del gobierno el tema de la producción y el empleo. Sin producción no hay empleo y sin empleo no hay país posible”, dijo Rodolfo Daer, horas antes.

El secretario general de Alimentación (STIA) agregó que “quiero la unidad de todos los sectores que se impongan a este gobierno antipopular”. Es que, por las políticas de Mauricio Macri, “la pobreza es cada vez mayor y el aparato productivo está “completamente parado”, dijo.

Daer destacó que “por la pérdida de poder adquisitivo la gente destina cada vez más dinero para los servicios y tiene menos plata para las necesidades básicas del hogar. El derrumbe de los salarios fue abismal por la devaluación y la inflación”.

El sindicalista explotó contra Mauricio Macri y dijo que “para este gobierno hay 10 millones de personas que están de más y no les interesa. Tampoco les interesa el consumo ni la producción, solo están enfocados en cortar el déficit para pagar la deuda externa”.

Por otra parte expresó que “tenemos la inflación solo comparable con los países más postergados del mundo y el aparato productivo está parado. El gobierno prometió una lluvia de inversiones y no vino ninguna. Ni los trabajadores ni los inversores tienen poder de progreso en este país”.