Pese a los despidos, el intendente de Chacabuco atacó el paro

Víctor Aiola, el Intendente de la ciudad bonaerense de Chacabuco, se pronunció en contra del paro llevado a cabo por la central obrera (CGT), aún cuando su ciudad fue epicentro de despidos masivos de una empresa constructora y dos alimenticias que impactaron en el empleo local. «Protestan pero no agarran una pala», dijo.

El jefe comunal de la ciudad bonaerense de Chacabuco se pronunció en términos despectivos al referirse a la medida de reclamo llevada adelante a nivel nacional por los trabajadores de la Confederación General del Trabajo (CGT), a pesar que su ciudad fue noticia hace dos semanas, por despidos alimenticios en empresa constructora y en las alimenticias Maitén y Cuesta Colorada.

“Hay gente que protesta y hace años que no agarra una pala. Los sindicatos “quieren que le vaya mal al país”, dijo Aiola en una entrevista a un medio local.

Aiola además agregó que “muchos de los que están protestando no saben ni porqué protestan, los llevan en colectivos, le pagan, le dan el sándwich y la coca” y completó diciendo “hay gente que protesta y hace años que no agarra una pala”.

Recordemos que en abril de 2017 el propio Aiola no se solidarizó con los 100 despedidos de la fábrica local Ingredion. Durante las protestas, el cuerpo de infantería protegió la empresa.

Este año tres empresas anunciaron su cierre en Chacabuco: se trata de Cuesta Colorada, Petro Nort y Maitén que dejaron 40 trabajadores en la calle.

Dos alimenticias y una constructora

Las alimenticias Maitén y Cuesta Colorada de la localidad bonaerense de Chacabuco anunciaron despidos masivos por cierre, a principios de junio.

La molinera Cuesta Colorada ubicada en el parque industrial de Chacabuco se sumó al anuncio de la panificadora Maitén, que dejó a 18 trabajadores sin empleo.

El argumento de Maitén fue que la empresa de galletitas Don Satur, con la cual trabajan, rescindiría el contrato y dejaría de comprarle la producción a partir de junio.

Tal como sucede con Cuesta Colorada, la empresa pretende abonar el 50% de la indemnización, por lo que los trabajadores nucleados en el Sindicato de Trabajadores de Industrias de la Alimentación (STIA PBA), comenzaron los reclamos en el Ministerio de Trabajo.

A la situación de las alimenticias hay que sumarle otros despidos en el rubro de la construcción en la misma localidad. Alrededor de 10 trabajadores fueron despedidos del obrador de la Ruta 7. La firma es una Unión Transitoria de Empresas (conocida en la jerga por las siglas UTE) conformada por HOMAQ SA, Constructora Dos Arroyos SA y UCSA.

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