Las empresas alimenticias finalmente llevaron su estructura de costos a la Secretaría de Comercio de la Nación, después que el presidente Macri y la gobernadora María Eugenia Vidal, amenazaran con controlar el traslado de la devaluación a los precios entre los privados
Entre ayer y hoy comenzaron a efectivizarse los encuentros entre los empresarios de las industrias alimenticias y el gobierno nacional. El Ejecutivo busca que declaren sus estructuras de costos y los planes de aumento de precios.
Es así que las últimas horas se están concretando alrededor de treinta reuniones individuales con empresas de alimentación y consumo general.
Los encuentros que encabeza el subsecretario de Comercio Interior, Ignacio Werner, son individuales con los directivos de cada empresa y en todos los casos el Gobierno busca «conocer en profundidad los efectos que han tenido los cambios de contexto económico de las últimas semanas sobre los precios al consumidor».
«Les estamos pidiendo que cada empresa actúe con responsabilidad en este contexto, buscando entre todos que no se afecte el consumo de los argentinos», dijeron fuentes del Ministerio de Producción.
Además de pedir «responsabilidad» a las empresas en el tema precios, el Gobierno les ofreció «trabajar en conjunto» para lograr que la suba -en el caso de ser necesaria- tenga el menor impacto posible sobre la gente.
El Gobierno interviene por las subas desmedidas
Distintos relevamientos privados señalaron que los productos que más subieron de precio en los últimos días fueron la harina, pastas secas, galletitas, gaseosas, cervezas, yerbas, aceite, queso untable, detergentes, pan y flanes.
En los casos en los que los funcionarios adviertan que el problema va «más allá del aumento de costos de las últimas semanas», el Gobierno decidió dar intervención a la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia para «iniciar investigaciones en los mercados que den señales de abuso de posición dominante».
Entre las empresas convocadas se esperan que pasen a lo largo de estas tres jornadas directivos de Danone, Pepsico, Mondelez, Mastellone, Aceitera General Deheza (AGD), Molinos Río de la Plata, Arcor, Unilever, Tabacal, Procter & Gamble y Kimberly Clark.
Las reuniones tienen como contexto el incremento de 2,7% que registró el Índice de Precios al Consumidor a nivel nacional en abril, impulsada por la suba de las tarifas públicas, el transporte y los alimentos.
Con esta suba, en el primer cuatrimestre del año la inflación minorista fue de 9,6%, un nivel que impacta de lleno con la meta de inflación del 15% prevista por el Gobierno para todo 2018.
A esto se sumó además, que en las últimas semanas el dólar marcó una fuerte suba, al pasar a una cotización de $25 pesos.
«Nos seguiremos juntando con todos los actores proveedores de los principales productos de consumo masivo de la Argentina» manifestaron desde Comercio.
A pesar de la coyuntura marcada por la apreciación del dólar frente al peso, desde la Secretaría de Comercio se aclaró que las reuniones se venían realizando en forma periódica pero ahora se intensificaron para pedir responsabilidad en su gestión de precios.
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